Al incorporarse un colector fotovoltaico al panel de hidrógeno, se convierte la luz solar y el vapor de agua del aire directamente en hidrógeno. Es por ello que la conexión entre los paneles de hidrógeno que se instalen en un tejado debe ser por medio de tuberías. La eficiencia de este invento es de un 15% que, aunque parezca muy poco, es mayor que las formas tradicionales de conseguir hidrógeno.
La intención no es sustituir a los parques eólicos y huertas solares. Lo que se pretende es sustituir al carbón, el gasoil, petróleo, incluso al gas natural y la energía nuclear. Estamos viendo que nuestro planeta dispone de suficientes recursos naturales renovables, que pueden mover toda nuestra vida, industria y economía de una forma limpia. Los sistemas tradicionales para generar hidrógenos siguen siendo necesarias. Es por ello que las instalaciones de aerogeneradores, las huertas solares y el autoconsumo fotovoltaico van a seguir siendo necesarios.